¡Buenas tardes! Muy buenas tardes, personal del Área 08. Por favor, si no les… ah, gracias. ¿Se me oye bien? ¿Está encendido? Excelente, muy amable. No, ya está bien, gracias.
Buenas tardes. Algunos de ustedes ya me conocen de la entrevista de evaluación y transferencia. Soy el Archivista Jefe del Área 08, el doctor Reach. Sólo Reach, por favor.
Casi todos ustedes han llegado al Sitio hace unos pocos días con uno de los nuevos grupos del Destacamento Móvil Beta-7, que están intentando rastrear posibles ejemplos de macrofauna oceánica que hemos clasificado como anómala… les deseamos toda la fortuna que se merezcan, y más. Les hará falta. Pero ustedes, la mayor parte de ustedes, en todo caso, acaban de recibir el nivel de autorización uno. Felicidades, por cierto. Casi todo el personal de la Fundación se queda en el Nivel Cero. Es decir, que al igual que ustedes hasta hace poco, no tienen ni idea de que la Fundación existe.
En todo caso, un nivel de autorización uno significa que tienen que conocer una serie de conceptos básicos sobre la Fundación antes de meterse de lleno en el trabajo.
Me han encargado darles una serie de seminarios sobre algunos de los aspectos básicos de la Fundación y de los términos más importantes que deberán conocer y comprender. ¡Para reforzar mis palabras, he elaborado una presentación con imágenes! Debidamente censuradas, claro.
Veamos, casi todos son, según he podido comprobar, miembros del destacamento de seguridad… es cierto que en la Fundación se realizan trabajos peligrosos, pero deben saber, en primer lugar, que son trabajos peligrosos para todo el personal. No exponemos a los guardias a las bestias del piso de abajo, ni a los SCP-ES-002 cuando no les hemos puesto sus ochenta minutos diarios de música, ni a los sujetos de prueba afectados por ese SCP mutágeno, ni les ponemos a tocar la sonata maldita. No, por lo general sólo recurrimos a los grupos de respuesta, defensa y seguridad del Sitio cuando las cosas se han ido de madre. Es decir, cuando hay una brecha en la contención. En ese momento, todos estamos más o menos en peligro-¿qué?
Oh. Sí, disculpen un segundo.
(…)
La Oficial de Seguridad Otero les explicará sus deberes y los riesgos que les corresponden en otro seminario. Discúlpenme. Suelo, uh, divagar en estas ocasiones.
Por dónde… iba… ah, ignoren estas imágenes. Son de la última brecha de contención de-
(…)
Sí, lo sé. Nada agradable, pero fascinante, desde un punto de vista anatómico. Hasta aquel día creía que había visto el cuerpo humano en sus peores momentos, pero me equivocaba. En fin.
Bien. A estas alturas debería decirles que saben lo suficiente de la Fundación como para confiarles ciertos aspectos, digamos, idiosincráticos de nuestros protocolos de seguridad. No los detalles de todos los Procedimientos Estándar de Seguridad, claro. Y, desde luego, tampoco los Procedimientos Especiales de Contención de la mayoría de las anomalías en contención. Excepto por orden ejecutiva de diseminarlos, están clasificados hasta que se producen brechas de contención. Por algo vivimos en un bloque separado al sector de contención de la zona residencial del Área. No, me refiero a algo mucho más sencillo.
En este Área tenemos cientos de anomalías en contención. La mayoría son Seguros. Algunos son Euclid. Quizá tengamos algún Keter. ¿Saben lo que significan estos términos? Usted mismo, adelante.
(…)
No, no son niveles de letalidad para el personal. Muchas anomalías de clase Euclid, e incluso algunas de clase Segura, les podrían matar con tanta facilidad y rapidez que todos los protocolos del mundo serían inútiles a la hora de protegerles, y hay Keter que no son exactamente letales. Pero sí es cierto que gracias a los Protocolos Especiales de Contención, la mortalidad en el personal de contención, es decir, los que nos aseguramos de que las celdas no se abran, se reduce enormemente. A veces incluso no hay bajas en absoluto. Pero las Clases no indican lo letal que es un objeto, sólo lo sugieren, y a menudo no tienen relación con la realidad. ¿Algún otro intento?
(…)
Casi, pero no. La idea de que los entes clasificados como Seguros son fácilmente contenibles es bastante correcta, y la idea de que los Euclid son relativamente más… difíciles de contener que los Seguros también es correcta. Pero algunos Euclid podrían resultar Keter, y algunos Keter podrían confundirse con Euclid desde esta clasificación, puesto que ciertos Keter prácticamente no presentan riesgos en su contención, sino que reciben su clasificación por los riesgos inherentes a sus capacidades y a los efectos que tendrían fuera de contención. Es más, hay Keter que han sido de contención muy simple hasta la fecha. Por supuesto, no puedo darles ejemplos. ¿Algún otro intento?
(…)
… no, no se trataba de darles nombres que "molasen." Aunque, como memeticista, entiendo su observación. Y de hecho, en cierto modo, tiene razón. Se han intentado otros sistemas de clasificación, nombres que fueran más o menos prácticos o descriptivos de las propiedades de un objeto. Sin embargo, todos esos sistemas han caído en desuso, y el viejo sistema SEK se ha mantenido incólume, a pesar de que podríamos haberlos llamado Clases de Objeto 1, 2 y 3. Incluso podríamos haber reservado el 4 para los objetos anómalos sub-Seguros.
Pero no. Tenemos el sistema de clasificación SEK. ¿Por qué?
Primero, todos ustedes tenían parte de razón. Originalmente, se daba una evaluación del riesgo que suponía un objeto peligroso susceptible de ser una anomalía, y se le daba la clasificación Segura si sólo podía ser destructivo cuando se lo sacaba de su entorno de origen, se lo manipulaba o interactuaba con algo que no fuera de su entorno de origen.
En la pantalla tienen una imagen de SCP-914, el paradigma de un objeto Seguro. No puedo darles muchos detalles, pero les diré que, por mucho que el personal de contención que aparece en la imagen esté desprotegido y con ropa de calle alrededor de la anomalía, ninguno de ellos querría estar ahí cuando se procediese a operarlo. Podríamos llamarlo prudencia, pero hasta ellos mismos querrían considerarlo experiencia.
A los Euclid se les definía por su imprevisibilidad, su capacidad para actuar de modos diferentes en circunstancias diferentes o su sintiencia o conciencia, cuando se trataba de personas… se darán cuenta de que he empleado la palabra "personas." Bueno, no les voy a mentir, en aquellos tiempos se hacía, pero ya no. Hoy en día ya no hablamos de personas en contención. Son objetos, especímenes o sujetos, como mucho. No se olviden de controlar sus sentimientos al respecto; la contención es primordial. Siempre.
Disculpen ese pequeño inciso. Siempre es un tema difícil para los recién llegados… bien, en la pantalla pueden ver una imagen de SCP-ES-075. Sí, parece un tipo debajo de una sábana, ¿verdad? Bueno, pues es un objeto de clase Euclid. Por cierto, agradecemos la inestimable cooperación del Investigador Jefe de SCP-ES-075, el doctor Seik, que nos ha permitido emplear este documento gráfico. Volviendo a cero setenta y cinco, podemos mantenerle en contención con relativa facilidad, pero es capaz de inducir cambios estructurales considerables en un ser humano mediante el mero contacto físico… y, lo que es peor, puede provocar estos cambios estructurales a voluntad. Esto lo convierte en inherentemente impredecible, aunque hasta el momento no haya hecho nada que no pudiéramos contrarrestar o que no haya dejado de hacer por sí solo.
Por último, los Keter son fenómenos tan peligrosos que no podían recibir solamente la clasificación Euclid. Una entidad o anomalía de clase Euclid es peligrosa porque es sus intenciones, de tenerlas, o sus métodos, de poseerlos, o sus capacidades en general, resultan impredecibles. Un Keter no es del todo impredecible. De hecho, en muchas ocasiones sabemos con precisión qué hace y qué es.
(…)
Sí, sé que es una imagen desagradable. No pretende ser otra cosa, la he escogido por lo repulsiva que es. Entiéndanlo, su trabajo con la Fundación no va a ser un tranquilo paseo por el parque; la mayoría de ustedes están aquí precisamente porque saben lo malas que van a ser sus vidas a partir de aquí y aún así han decidido venir. A diferencia de lo que puedan oír, no obligamos a nadie a venir aquí. Queremos gente que esté dispuesta a hacer todo lo posible por contener a las anomalías de las que nos ocupamos. Incluidas cosas como esta.
Esta imagen pertenece a un SCP de clase Keter. No puedo decirles cuál. No sólo no tengo autorización para revelar detalles sobre este SCP, es que si lo hiciera desataría múltiples alarmas de seguridad de datos y más de un concepto gatillo, una trampa memética, en mi cerebro. Ser Archivista Jefe en la Fundación conlleva una enorme responsabilidad. Pero todos estamos de acuerdo, supongo, en que esta imagen podría nutrir nuestras pesadillas un par de años, de haber estado ahí cuando la tomaron.
Permítanme… una imagen algo más alegre. El mar en torno al Área-08.
Puede que no se den cuenta de inmediato, pero hay dos posibles amenazas de clase Keter ahí abajo. ¿Ven esa sombra, eso que parece una ola? Podría ser una entidad biológica. Segura, si podemos tirarla a una piscina olímpica y dejar que se pudra sin riesgo para la piscina. Euclid, si tenemos que trasladarla regularmente a otra piscina porque la va destrozando o intenta romperla. O Keter, si tenemos que descuartizarla, incinerarla, mezclar sus cenizas con cemento y emplear ese cemento como pavimento para algún Área de Contención Armada en Siberia, el Gobi o uno de los polos… porque si no lo hacemos, se reintegrará, se reanimará e intentará acabar con toda forma de vida conocida, porque es inteligente y la hemos tenido que contener para evitar que varias potencias mundiales empiecen a preguntarse dónde están yendo a parar sus submarinos nucleares.
(…)
No, no me estoy inventando nada. Tranquilos, por favor. Por favor… gracias.
Verán, los Keter empezaron a clasificarse como tales porque no había recursos capaces de contenerlos. Sólo recursos capaces de contenerlos temporalmente. En celdas. En cajas. En Áreas de Contención. En mitad de desiertos rodeados de alambradas y rodeados de alambrada. En satélites y otros orbitantes. En el interior de conceptos abstractos. Me da igual. Originalmente, la Fundación sólo podía mirarlos desde cierta distancia e impedir que el público se acercase demasiado a ellos.
La cosa ha cambiado, claro está… hoy en día los Keter son, básicamente, Euclid de muy alto rango. Así que, de nuevo, ¿qué los hace tan especiales? ¿Sí?
(…)
Exacto. El coste.
El coste administrativo y económico. (…) No, no se pongan así, es lo que hay. Los recursos con los que cuenta la Fundación son extensos, pero en modo alguno son ilimitados. Incluso aunque empleáramos cada uno de los objetos que contenemos para lucrarnos, no podríamos ganar suficiente dinero como para mantenernos operando indefinidamente. Construir Sitios y Áreas de Contención en torno a anomalías fijas y adquirir los terrenos colindantes, organizar Destacamentos Móviles y equipar instalaciones de investigación, comprar a lobbies y sobornar a peces gordos… ¿de verdad creen que algo de lo que hace la Fundación es barato?
Bueno, sí. Hasta la Fundación compra clips y comida y esas cosas. Pero esa es otra historia.
Originalmente, la Fundación clasificaba aquello a lo que contenía en función de su peligrosidad porque debía ser pragmática a la hora de capturarlo, pero este planteamiento no resistió años de pruebas de campo ininterrumpidas, así que se pasó a clasificar las anomalías una vez habían sido aseguradas. En aquel período, la Fundación clasificaba aquello a lo que se enfrentaba en función de sus capacidades observables y de lo impredecibles que resultaban una vez era contenido, pero con el tiempo resultó que eso sólo llevaba a discusiones sobre los Seguros que deberían ser Euclid y los Euclid que deberían ser Keter y los Keter que deberían ser Seguros. Incluso la clasificación previa era más clara.
Sí, sí, de veras, no es broma. Algún Keter podría clasificarse como Seguro, dado que lo que sea que amenazan con hacer no lo están haciendo, incluso aunque parezcan muy capaces de hacerlo. No sé de ninguno al que hayan rebajado tanto su clase, pero seguro que hay alguno.
La cuestión está en que, una vez diseñamos y construimos un entorno de contención para un SCP, el precio inicial de la contención (que suele ser considerable) está pagado… y, pasado este primer gasto, si el entorno de contención funciona bien y sin fallos, lo llamamos Seguro. Si el coste de contenerlo y estudiarlo es considerable porque causa bajas, daños o ambos, lo llamamos Euclid. Si el coste de contenerlo sin ningún intento de estudio y experimentación resulta insoportablemente alto, pero el fallo de contención resultaría todavía mayor, lo llamamos Keter.
(…)
No, no es una broma. No sé contar chistes, de hecho. Suelen decirme a menudo que me falta gracia, aunque no sabría por qué-(…)
Disculpen. (…) Sí, no volveré a sacar el tema. Gracias, Oficial. No sé qué me ha dado hoy, no dejo de desviarme del tema.
Empleamos el dinero como un índice general de riesgo. Incluimos los daños que podrían provocarse en poblaciones civiles, los costes de recontención y limpieza post-brecha. También los de control de la información, que a veces son inmensos… Incluso los costes de reparación en zonas urbanas. Sobre todo los costes de reparación en zonas urbanas. La gente tiende a darse cuenta de que hay un cráter enorme donde "ayer" había un parque por muchos amnésticos que les demos. Créanme, lo sé por experiencia.
¿Qué deben saber pues de las Clases de Objeto? Bueno, mi único consejo real es que, cuando les destinen a la contención de un objeto cualquiera, les interesa atender a los Procedimientos Especiales de Contención más que a la Clase de Objeto.
Desde un punto de vista técnico, la Clase de Objeto la otorgan los especialistas de contención, un grupo de profesionales sobradamente preparados y experimentados. Hay todo un algoritmo de clasificación que tiene en cuenta muchos de los factores que hemos mencionado; coste-beneficio, riesgos de contención, bajas anuales en el personal destinado al objeto… incluso consideraciones éticas y morales, y desde luego, el daño potencial provocado por la liberación del objeto. Suelen resumirlo todo en un unidades monetarias porque resulta mucho más práctico a la hora de cuadrar presupuestos con Administración, pero eso no es algo que deba preocuparles a ustedes.
A ustedes han de preocuparles los Procedimientos Especiales de Contención porque son los que les mantendrán vivos y preparados para enfrentarse a lo que hay en la zona de contención cuando hay una brecha. Créanme. También lo digo por experiencia.
Algunos de sus colegas más veteranos les dirán que tienen que evitar a los Keter como a la plaga. No les diré que sean el destino más deseable. Son peligrosos casi por definición. Algunos les dirán que los Euclid son todavía peores, porque más de uno está a un pelo de ser reclasificado como Keter. Y habrá quien se queje de que los Seguros se cobran más bajas que los Euclid y los Keter… pero rara vez se acuerdan de mencionar que esto suele ocurrir porque tenemos muchos más objetos Seguros en contención. Y porque experimentamos de mejor grado con estos objetos… exponiendo sólo a sujetos de clase D, debo recordarles.
En resumen. Seguro, Euclid o Keter, no tiene que preocuparles. ¿Qué dicen los Procedimientos de Contención? Eso es lo que tienen que conocer y comprender al dedillo.
Bueno, supongo que ya va siendo hora de un descanso. En el siguiente seminario hablaremos de los sujetos de clase D, su papel en la Fundación y su relación con ustedes. Y les aseguro que no es algo tan tétrico como pueda parecer. No son esclavos, no son carne de cañón y no son inhumanos. Simplemente, siguen reglas diferentes y tienen que tomar riesgos más directos que nosotros.
Y, técnicamente, casi todos están aquí por propia voluntad, y tenemos los papeles que lo demuestran.
Gracias por su atención.