
Fotografía de una hoja de SCP-ES-258 realizada por el Agente Marcus Delaroy previa al hallazgo del objeto.
Ítem #: SCP-ES-258
Clasificación del Objeto: Euclid
Procedimientos Especiales de Contención: SCP-ES-258 debe ser mantenido en un patio cerrado del Sitio-34. Más allá de sus características físicas anómalas, el objeto se comporta como un Carzo (Haplorhus peruviana) común y corriente, por lo que deberá mantenerse como tal regándolo a diario.
SCP-ES-258 necesita mantener conversaciones sobre el amor cada dos semanas. Con dicho fin cualquier personal del plantel de la Fundación de Nivel 2 o superior puede llenar un formulario S-34/ES-258 para designarse como sujeto para interactuar con SCP-ES-258 con al menos dos días de antelación y con un fin objetivo respecto a la investigación de SCP-ES-258. En caso de que no haya personal dispuesto o con justificación para interactuar con SCP-ES-258, se asignará a un sujeto Clase D acompañado por un guardia de seguridad para llevar a cabo el protocolo.
Descripción: SCP-ES-258 es un Haplorhus Peruviana de 3.26 metros de altura y 1.14 metros de diámetro el cual ha visto sus hojas cambiadas por una cantidad no cuantificada de labios humanos femeninos. Al desenterrarse de su locación original, los agentes vieron expuestas las raíces de SCP-ES-258, declarando que estas lucían como una figura humana femenina. Al estudiarse se determinó que se trataba de un cuerpo humano con dos corazones, sin embargo debido al estado de descomposición del cuerpo el mismo no ha podido identificarse, y la carencia de dientes en el cráneo imposibilita la identificación por dentadura.
El objeto es sapiente y es consciente de su condición como árbol, habiendo declarado que recuerda haber sido humana alguna vez, sin embargo, SCP-ES-258 sólo puede recordar emociones fuertes experimentadas durante su etapa humana, como la depresión o la ira. Investigaciones respecto a la identidad de SCP-ES-258 siguen en curso, aproximando una época para su existencia humana entre 1920 y 1940.
En su estado silvestre, SCP-ES-258 producía un efecto anómalo sobre los individuos que interactuaban con él, provocando que estos permanecieran a su lado hasta que ocurriese la muerte por causas naturales, como la deshidratación o el hambre. En caso de no interactuar con ningún individuo por periodos prolongados, SCP-ES-258 entrará en un cuadro depresivo, provocando la aparición de un fenómeno anómalo por el cual atraerá a un individuo cercano hacia su locación por la fuerza. Las visitas protocolarias para la contención del objeto no deben estar espaciadas por más de dos semanas entre ocurrencias para evitar desencadenar el efecto expansivo de la entidad.
Actualmente, gracias a la interacción diaria del objeto con personal de la Fundación o sujetos Clase D, este efecto anómalo se ha visto anulado, sin embargo, SCP-ES-258 retiene una capacidad de omnisciencia sobre la vida amorosa de las personas con las que interactúa. Se desconoce si el alcance del conocimiento de SCP-ES-258 va más allá de las relaciones amorosas humanas. Intentos por extraer información no relativa a las emociones de SCP-ES-258 han resultado en fracaso.
Anexo 258/001: Registro de Recuperación
Anexo 258/002: Entrevistas a SCP-ES-258.
El siguiente anexo es una recopilación práctica de las entrevistas realizadas a SCP-ES-258 por personal de la Fundación con el fin de identificar quién fue en vida. Los registros han sido sorteados de menor a mayor relevancia en relación con los datos indirectamente proporcionados por SCP-ES-258 con respecto a su identidad mediante las entrevistas.
La teoría más aceptada en lo que se refiere a la identidad de SCP-ES-258 es la de Alejandra Ekaterina Cabeza, una ensayista peruana de ascendencia ruso-española la cual vivió entre 1910 y 1940. Se tiene constancias de que Alejandra Cabeza formó parte activa en la revolución de Trujillo. En sus escritos refleja culpa por haber sobrevivido a los ataques, y se hace referencia constante a un "niño uniformado" que murió durante el fusilamiento seguido tras la represión del movimiento insurgente aprista. Se ignora la identidad del amante de Alejandra, pues en ninguno de sus escritos se refiere a él con nombre y apellido. La última vez que Alejandra Ekaterina Cabeza fue vista fue en agosto de 1939. Desapareció de su hogar dejando la siguiente nota:
"Porque mi corazón no volvió a latir cuando el tuyo se detuvo,
Tuve que tomar tu corazón en mis manos para poder seguir viviendo.
En este mundo sólo hay guerra.
En este mundo sólo hay odio.
En este mundo sólo hay dolor.
Mi peregrinaje acabará cuando encuentre el amor,
Pero el amor que conocí ya no existe más que en mis manos,
Por ende habré de caminar hasta que nuestros corazones sean uno.
Cual Ludwica con Chopin,
Llevaré tu corazón a donde pertenece.
Junto al mío.
Y cuando estemos juntos,
En este mundo sólo habrá amor".