El cuartel general HQ aprobó la exploración y asalto a los túneles de debajo del Lugar A para comprobar la totalidad de la infección de SCP-610. La destrucción de los Lugares A y C demuestra que el SCP-610 puede ser contenido y destruido, cosa que hace que la misión de encontrar el núcleo de la infección sea la mayor prioridad en el momento. El descenso inicial de los túneles se llevó a cabo con cinco equipos, dos de investigación y tres de asalto, con suficientemente equipaje para establecer una base subterránea de operaciones.
Se descendía de los túneles usando un sistema de poleas y pesos para mover el equipo. Los equipos de asalto fueron los primeros en descender, armados con lanzallamas para limpiar el área de SCP-610. Todos los equipos descendieron sin incidente alguno y las unidades “flagmíferas” tuvieron un descenso sin incidentes hacia donde se perdió el dron RSCP610, donde hay una corriente subterránea de agua.
El campo base reside a lo más hondo de una intersección triple, cuádruple si se cuenta la corriente de agua. El primer camino es el que iba del Lugar A hasta el HQ. El segundo lleva al pueblo en ruinas de las montañas, donde el dron RSCP610 fue destruido por una gran entidad de SCP-610. El tercer camino lleva al oeste y parece seguir la corriente de agua por una distancia desconocida. La cueva del cuartel general es bastante grande y su estructura se aguanta debido a unas formaciones rocosas que están cubiertas de material SCP-610 marchito. El estado de dicho material sugiere que tiene muchos años y parece servir refuerzo estructural. Se desconoce si es intencionado o no.
Los dos equipos de investigación se dividen entre el cuartel general y obtener muestras de SCP-610 en varios estados. No se detectaron material contagioso en dicha área y la criatura grabada por el dron no apareció por ningún lado. De los cuatro equipos de investigación, se ordenaron a tres investigar el camino inexplorado mientras se preparaba el dron aéreo para un segundo ascenso vertical.
No se detectaron infecciones de SCP-610 en el tercer camino hasta haber andado unos 3km, y las infecciones peligrosas no empezaron hasta los 16km. Incluso tras el largo camino andado por los equipos de asalto no se detectaron formas de vida basadas en SCP-610 y el material carnoso de las paredes de la cueva no opusieron resistencia a los equipos. Los informes más significantes fueron el incremento de espesor del material, indicando una fuente, y la ausencia de contaminación de SCP-610 del agua. Se cortó una muestra de prueba de las paredes de la caverna y se puso en el corriente de agua. No exhibió ninguna reacción inusual, y fue rápidamente arrastrada por el corriente.
A los 20km el líder del equipo de asalto pidió un buggy de transporte. Uno de ellos estaba disponible en el cuartel general, aunque se tardaría algo de tiempo de moverlo desde el cuartel hasta el equipo en control remoto. Las raciones dadas al equipo de asalto fueron suficientes para establecer un campamento provisional mientras llegaba el buggy.
Durante estos instantes también se envió el dron aéreo a explorar el camino vertical. Los resultados de dicha exploración se pusieron es “stand-by” con la llegada del Buggy al cuartel general y se archivó en el documento [DATOS ELIMINADOS].
El buggy llego hasta el equipo de asalto sin ningún hecho destacable, sin embargo, mientras preparaban el buggy para seguir con la exploración el equipo de asalto fue atacado por un gran número de formas de vida infectadas de SCP-610 que emergieron de una zona seguida a la suya. Algunas grabaciones recuperadas de los miembros del equipo muestran que fueron atacados con la guardia baja debido a que los monstruos SCP-610 no hicieron ruido y eran indetectables. En una de las grabaciones hay un par de segundos en los que parece que las criaturas salen del material de la pared; no saliendo de la pared, sino que fueron creados por el material extraño de la pared para luego romperlo y actuar individualmente.
Durante el ataque y en un intento de proteger el buggy, se perdió contacto con ██ miembros debido a que cayeron a la corriente de agua. Sin embargo, se recuperó el contacto en las grabaciones archivadas en SCP-610-L6. El resto del equipo constaba de tres miembros, armados con un único lanzallamas. El uso de dicha arma fue vital para repeler el ataque, debido a que las armas de fuego convencionales hacían un daño mínimo a las criaturas. Dichas criaturas no mostraban signos suficientemente claros para ser asociados con alguna forma de vida conocida de la región, haciendo más plausible la hipótesis de que fueron generadas por la infección de SCP-610 como una forma de autodefensa.
No hubo más bajas durante el ataque y los miembros supervivientes pudieron eliminar todas las formas infectadas que les atacaban, permitiéndoles continuar con la exploración, con las órdenes añadidas de encontrar a los miembros perdidos. A los 20km el río y el camino se separaban, por lo que las órdenes de recuperar a los miembros perdidos se anularon, debido a que no era seguro navegar por dichas aguas.
Pasó un total de ██:██:██ antes de que el equipo llegara al final del túnel. En el perímetro del área ahora conocido como Lugar B el equipo entró de nuevo en combate, con un número menor de criaturas SCP-610 pero mucho más grandes en tamaño. Estas criaturas aparecieron en el túnel como si les estuvieran esperado. Se eliminaron usando el lanzallamas, aunque se agotó la gasolina durante el combate. Ahora, el equipo de ataque solo tenía armas de fuego estándar y lanzallamas de uso personal de corta distancia.
Se permite que pasen cinco minutos antes de que el equipo proceda a inspeccionar más adentro el Lugar B, con la cautela para evitar más asaltos por seres infectados de SCP-610. El túnel se agranda más a lo que parece que fue una villa de edad indeterminada. La construcción de los edificios en dicha área son primitivos comparado con las construcciones del Lugar A y Lugar C, que son claramente de construcción humana. Muchas de las construcciones así como su estructura indican que dicha villa fue afectada por un derrumbamiento. Los edificios más interesantes parecen ser una iglesia con una torre de reloj, que aún funciona. Dicho edificio fue construido encima de otros dos edificios más viejos que están completamente destruidos pero su base es aún estable.
Alrededor de todas las estructuras de ésta área hay una depresión en el suelo lleno de una substancia que parece una forma líquida de la carne infectada por el SCP-610. Esta piscina de líquido se mueve, como si se moviera dirigida por alguna fuerza desconocida, acercándose y alejándose de ciertos puntos de contacto y con un mareaje formado por vientos que no se pueden sentir. El equipo esquiva a toda costa dicha piscina y procede a entrar en las ruinas lentamente, haciendo que el objetivo de investigación principal sea la iglesia.
Dentro de la iglesia se encuentran varias hileras de sillas, como en todas las iglesias. Sin embargo, solo hay cuatro de ellas, una de ellas rota; Cuando el edificio podría tener más de veinte. Los otros tres están puestos en una forma de T. No hay rastros de polvo en ninguna superficie, todo el edificio está impolutamente limpio, dada la localización y edad estimada. Detrás de la formación en T hay un área con una “piscina” de SCP-610 equivalente a la del exterior.
La iglesia y las ruinas de alrededor parecen inhabitadas. En la exploración de la iglesia no ocurre ningún hecho remarcable hasta que empieza a sonar el reloj de la torre. Este sistema hace que se recorra un escalofrío por todo el edificio, seguido de varios gritos humanos prominentes del techo. Se ilumina el techo para revelar una gran masa de SCP-610 del cual salen una serie de seis círculos de madera descendientes, cada uno pegado a un humano, el cual cubre desde el cuello hasta el pie de SCP-610, pero dejando la cabeza aparentemente desinfectada. Estos humanos cautivos gritan mientras el reloj sigue sonante y los círculos se mueven hacia el suelo. El equipo empieza a moverse hacia adelante para investigar cuando un extraño sollozo viene del exterior del edificio, forzando al equipo a cubrirse en las sombras, detrás del púlpito. Los focos de luz se apagan, cubriendo el lugar de oscuridad. Se evita activar la visión nocturna para evitar revelar donde está el equipo.
Se siguen escuchando sonidos prominentes del exterior de la iglesia, acercándose cada vez más, aunque los gritos de los humanos cautivos siguen escuchándose mucho más fuerte. Como mínimo uno vio al equipo, por lo que los humanos cautivos empezaron a pedir a gritos que les salvaras. Se ilumina una vela de la entrada de la iglesia, para que después se encienda la del otro lado de la entrada. Se puede ver una figura sosteniendo una pequeña antorcha y moviéndose hacia adelante y detrás para encender las velas de la entrada. Después de esto, la llama se aplica a una cuerda envuelta de SCP-610. Que prende rápidamente y se esparce por toda el sistema de la entrada. La luz ilumina la gran mayoría de cruces de la iglesia, pero no llega a descubrir el escondrijo del equipo. Los cautivos, que aparecen iluminados por la luz, no muestran el color beige característico de una infección de SCP-610, sino que están atrapadas en una red roja que se muestra en constante movimiento, retorciéndose en sí misma.
Desde el exterior de la iglesia una marea de infectados de SCP-610 rodean rápidamente la sala, ignorando el hombre que ilumina las velas, el cual está situado en el centro de la sala. Se acercan a los cautivos de los círculos de madera y empiezan a destripar la masa roja de SCP-610 mientras los humanos gritan y lloran como respuesta. Según lo que se puede ver en las grabaciones, la masa de SCP-610 roja parece estar conectada a los cautivas, usándolos como fuente de sustento, para alimentar a los infectados SCP-610 normales. Las criaturas de SCP-610 destripan la masa roja con demasiada fuerza, haciendo que también arranquen la piel y músculos de los humanos. Estas zonas expuestas se recubren rápidamente de masa roja, la cual crece en tamaño. Este “ritual alimentario” continúa durante aproximadamente seis minutos, cuando la figura que iluminaba las velas hace sonar un gong, momento en el cual todas las criaturas se mueven a las sillas. Hay más criaturas que sillas pero ninguna se mueve de ellas.
El ser que hizo sonar el gong no se mueve para simplemente desvanecerse justo después, como si se hubiera desvanecido como el humo. Desde el área del altar se ve como un pilar de carne de SCP-610 se alza desde el agujero, ascendiendo hasta donde están todas las criaturas. No oyó ningún movimiento ni grabó ningún movimiento cuando el pilar paró de moverse. Este silencio dura durante diez minutos, período en cual ni siquiera se oyen a los humanos cautivos, los cuales dejaron de gritar hace un rato, pero no se puede determinar el segundo exacto. El pilar de SCP-610 desciende hasta el agujero de nuevo sin ningún aviso, haciendo que todos los infectados se retiren. Cuando el equipo sale de su escondrijo después de que los infectados se han ido de la zona, las velas siguen encendidas. Los humanos cautivos se encuentran ahora a nivel del suelo; Y aunque han dejado de gritar aún muestran signos de vida, siguen respirando y moviéndose.
Al marchar de la iglesia la grabación de las cámaras de los tres miembros fallan. La cámara 1 cesa de transmitir imágenes y sonidos, la cámara 2 empieza a gravar al aire durante varios metros y la cámara 3 graba el miembro de la cámara 2 siendo arrastrado por un zarcillo, el cual emerge directamente del suelo y llevándolo al otro lado de las ruinas. Se restaura la grabación de la cámara 1, la cual graba brevemente al miembro de la cámara 3 corriendo en la dirección del miembro perdido, para girarse al ver una riada de infectados de SCP-610 saliendo de entre los edificios.
Se inicia el combate entre los dos miembros restantes y la masa de infectados, usando rifles de as alto y los lanzallamas personales, rechazando a las hordas de forma exitosa y pudiendo hacerse un camino hasta el buggy. Al pasar por un edificio, el miembro de la cámara 1 es atacado por una figura parecida al ser humanoide que iluminaba las luces de la iglesia, el cual lleva una hoz de campo de gran envergadura. El propietario de la cámara 3 continúa avanzando hacia el buggy sin detenerse, sin embargo se encuentra el vehículo medio tragado por la masa de SCP-610 que cubre el suelo. Al girarse para buscar otra ruta de escape, el propietario de la cámara 3 se encuentra a la misma figura de la hoz gigante acercándose con el arma levantada. Se disparan dos tiros y la grabación termina.
Después de cinco horas, cuando se estaban tomando las decisiones definitivas para decidir cómo contener o eliminar el amenaza de SCP-610, se recuperó la grabación de los miembros perdidos en el río subterráneo con un cierto desfase de tiempo. Se estableció la grabación correctamente. El informe que se deriva de estas grabaciones ha sido clasificado como SCP-610-L6.
