Cuando tus sentidos volvieron a ti, estabas corriendo por el bosque.
No recuerdas como llegaste allí; todo lo que sabes es que debes seguir corriendo. Tu fuerza ya casi se ha ido, el aire se niega a entrar en tus pulmones, pero no debes detenerte.
¿Por qué está pasando esto?, ¿Cómo llegó esto a ocurrir?
Tu mente comienza a dar vueltas…
Todo comenzó hace cuatro días.
Era un día normal. Te despertaste, te pusiste a trabajar, volviste a casa, cenaste con tu familia y te fuiste a la cama a dormir junto a tu pareja.
Pero esa noche, tu no dormiste.
No es que no quisieras dormir. Simplemente no fuiste capaz de cerrar los ojos y soñar. Las horas avanzaron a medida que incómodamente te retorcías y girabas en la cama, con cuidado de no despertar a la persona a tu lado.
2 AM… 4 AM…
Sigue corriendo, sigue corriendo, no te detengas.
Eran las 6 AM y no dormiste en lo absoluto. Pero era hora de levantarse e ir a trabajar. Te cambiaste de ropa, te lavaste la cara, desayunaste y saliste de casa. "Todo está bien", pensaste, "Puedo descansar un poco durante la pausa para el café. Solo una pequeña siesta…"
Pero no tomaste esa siesta, ¿No? No. No conseguiste descansar ni un poco ese día. Había mucho trabajo que hacer.
No te detengas, oh por favor no dejes que me detenga.
Esa noche te encontraste a ti mismo en la cama. Retorciéndote y girando, retorciéndote y girando. El incesante tic-toc estaba empezando a volverte loco.
No hubo descanso para ti esa noche.
No hubo descanso para ti en la noche siguiente tampoco.
Y… sí, no descansaste ayer tampoco, ahora que lo piensas.
Maldición maldición maldición, ¿Por qué estoy corriendo? ¿Por qué?
Tu familia se dio cuenta. Hablaron sobre eso, pero tu cabeza te dolía. Simplemente querías que se callaran callaran CALLARAN para estar tranquilo por un rato. El silencio era confortante, aunque el constante zumbido, molestando en tu cabeza, estaba empeorando las cosas.
Ayer estuviste muy mal. No podías mantener los ojos abiertos, pero no podías dormir y OH, ¡Como me gustaría poder dormir un poco, por favor, solo un poco. Lucías terrible, dijeron tus compañeros de trabajo. ¡Oh, estás horrible!, ¿Cuándo fue la última vez que dormiste? Todos ellos haciendo la misma pregunta, la misma PUTA PREGUNTA, cuando solo deseabas un poco de silencio. Todo ese ruido te hacia irritar. Enojado. Estabas enojado. Solo querías algo de silencio, ¿Por qué no podían solo DEJARTE en PAZ por un—
Perdiste el conocimiento.
Y cuando tus sentidos volvieron a ti, estabas corriendo por el bosque.
correcorrecorrecorrecorrecorrecorrecorre
Tus manos están tibias.
correcorrecorrecorrecorrecorrecorrecorre
A medida que te adentrabas en el bosque, los árboles se volvían cada vez menos y menos escasos. Tienes que tener cuidado, sabes que, si tropiezas, no podrás levantarte.
correcorrecorrecorrecorrecorrecorrecor—
Pero era inevitable. Te tropezaste. Y caíste en el blando suelo del bosque.
…
El bosque estaba tranquilo.
…
Con tus fuerzas restantes, moviste tu cuerpo para mirar los alrededores. Es difícil respirar con la cara en el suelo.
…
Momentos después, escuchaste suaves pasos viniendo en tu dirección.
…
Pero no viste nada.
…
Se detuvieron. Y entonces, sentiste un dolor agudo en el estómago.
Quieres gritar. El dolor es insoportable. Pero estás demasiado cansado. Muy, muy cansado. Ni siquiera puedes levantar tu cabeza para ver las grandes marcas de garras que se formaban en tu abdomen, desgarrando tu piel y tu carne, dejando tus entrañas expuestas.
Antes de cerrar los ojos por última vez, viste un gran trozo de carne siendo arrancada de tu cuerpo, flotando por un tiempo, y luego desapareciendo en el aire con un ruido insoportable.