No puedo sentir mis piernas. Recuerdo vagamente que las tengo mientras subo con mis brazos.
No sería capaz de seguir adelante si no fuera por él. Él me acompaña, me escucha, y sabe exactamente que decir, pero sus ojos son lo que realmente me hacen seguir. Él tiene esos ojos amables.
Luego, ¡Él vino a mi y me dijo que alguien iba a venir! Estaba tan feliz, pero muy asustado, me preocupaba que me encontraran. Empecé a llamarlos. Él me miro y me dijo que iba a traerlos por mí, y él se fue. Me sentí aliviado, pero seguía llamándolos y subiendo. Después de un rato, él regresó. Él me dió una mirada triste y se disculpó, me dijo que la persona se había escapado. Estaba devastado. Él se veía triste.
Un poco más tarde; me dijo que alguien más había llegado. Tratamos de nuevo, pero, de nuevo, se escapó. Subí y grité y lloré, pero fue inútil. Él estaba muy molesto por verme así.
Cuando la tercera persona vino, él me prometió traérmelo. Tratamos de nuevo, ¡Y lo escuché! Oí sus pasos, ¡Estaba tan cerca! Pero cuando escuché el choque, sabía que algo había sucedido. Él regreso, y me dijo que estaba por llegar, pero se cayó, y se lastimó a si mismo. Él no estaba seguro de que se despertara. Lloré, incapaz de seguir subiendo. Él también lloró.
Luego vinieron más, muchos de ellos. Él no estaba seguro de lo que querían, pero dijo que tenían armas, y él estaba preocupado por mi. Él me dijo que me quedara donde estaba, y que trataría de mantenerlos lejos de mí. Él los mantuvo lejos por mucho, mucho tiempo, pero ellos seguían viniendo, razón por la cual dijo que iba a tener que hacer algo más drástico.
Él los hizo desaparecer.
No pude entender lo que paso, ¿Por que querían hacernos daño? ¿Por que no podían simplemente ayudarnos?
Seguí subiendo, y subiendo, y subiendo, y finalmente, llegué a la cima. No lo podía creer, él estaba muy feliz por mi.
La puerta no se podía abrir.
Lo intenté, golpeé tan duro como pude y seguí golpeando, pero no quería abrirse. No quedaba nada. Me quedé atrapado aquí, para siempre.
Pero al menos lo tenía a él. Y él tenía esos ojos amables.